DE LAS LÁGRIMAS PARA LA Y LA NOCHE
A propósito del poemario “Gris” de Juan Benavente
Las imágenes van llegando a la memoria como sonido de teclado, como melodía de piano o gotera de agua . Arrastra al oído a una sensación auditiva vibrante.
Un ambiente oscuro que amanece con las palabras que lo describen y todo se hace luz por obra de la poesía. Se liberan los versos del autor con versos que hablan asimismo en el lector, en la hoja abierta y en cada verso.
El hombre es la negación de la negación, el despeñado que no muere pero va a su muerte , un levitar pero que se escenifica agonizando poco a poco.
La vida es una pesadilla en donde salimos de ese encierro cada vez del laberinto del día tras día para aspirar a despertar.
Las contradicciones, el desasosiego, la fuerza que lleva a quedar encerrado en sus propias limitaciones. No se tiene espacio para vivir libre es la sentencia final.
09/07/10
JULIO CÉSAR BENAVIDES PARRA
No hay comentarios:
Publicar un comentario