POEMA PARA LA CIUDAD DEL NACER O MORIR
Había muerto con el cráneo partido
en el pasar de los lamentos
para el sacrificio humano
lo habían matado hace miles de años.
y esa escena se reiteraba
en mi cabeza y en la memoria de Diana
el arqueólogo lo había dicho
y preguntas muchas preguntas
se repasaban en nuestra mente.
Dos niños también como sacrificios humanos
y los eslabones
salpicaban sobre nuestro género
polvo que se levantaba
pasos agrietados.
En la ribera del inicio
de nuestros años
Caral ha nacido
y era la sociedad
del género equitativo
gobernaba mujer y hombre.
Eran tantos cerros
que nos ahogaban inmensos
para no salir
y entre interminables
muestras de ímpetu
para abrazar nuevos sueños
patria grande
Caral es el Perú y el Perú es Caral. 14/12/09
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