EN UN SUEÑO DESIERTO

Cansados los ojos. Un cuerpo lívido y la piel fría que al tocar recorrían todos sus extremas sensaciones.

Luz cobriza cayendo en el camino. Pasos que parten el camino rojizo y las huellas, se esfuman. Calcinado y fatigado vivir con un dolor en la espalda y se va robando los instantes que son mi vida.

Descanso o tal vez, en verdad decido cerrar los ojos porque la fatiga ha debilitado mi cuerpo. Han irrumpido las horas al esfumarse mis esperanzas.

El viento estremece el ventanal , la puerta chilla y mi oído se estremece, con mi rostro caído en desconsuelo, solo dibujo un gesto adusto que ha pintado horas nocturnas. Debo buscar el sueño para tener cálido el cuerpo, mis fuerzas son pequeñas luces que aún alumbran mi fuego ineterno. Descansar, dormir y apropiar una nueva vida a la vida.

15/09/09